Trabajar para servir es la encomiable premisa que abandera la labor del electricista
San Bernardino, Caracas.- La clase trabajadora venezolana ha venido creciendo y preparándose para asumir los nuevos retos, y dentro de ese equipo perfectamente engranado, hay uno indispensable, el de los electricistas.
Ellos acuden diariamente al llamado con compromiso, atienden con diligencia cada situación que se les presenta y enfrentan los desafíos con la mejor disposición.
Para Orlando Merchán este es un método infalible a la hora de poner manos a la obra en su faena. Él se graduó como electricista de distribución en la escuela del Centro de Servicios La Yaguara y ahora forma parte del equipo de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec).
“Una de las cosas más importantes que me llamó la atención del curso de electricista, es la capacidad que uno adquiere para aprender a trabajar con la energía, los riesgos y la satisfacción que sientes cuando resuelves los problemas de los demás que cuentan contigo. Yo pienso en las demás personas que necesitan el servicio eléctrico cada vez que voy a trabajar en un poste, que uno lo hace con todo el amor y cariño”, expresó Merchán.
Aunque es una profesión que implica riesgos, sus conocimientos en el área le permiten tomar las medidas de seguridad idóneas para prevenir accidentes.
“Antes de comenzar marcamos la zona, nos colocamos los guantes, verificamos la ausencia de tensión, verificamos el poste antes de subir, muchas precauciones que debemos tomar. Nosotros tenemos un buen equipo de trabajo, todos colaboramos en todo momento”, detalló.
Por su parte, Luis Pino, profesional en el campo descubrió su vocación a muy temprana edad y decidió seguir ese camino.
“Desde pequeño me gustó desarmar y armar radios, como me llamaba mucho la atención crecí con esa curiosidad que despertó mis ganas de ser electricista. En mi trabajo debo estar atento para que todo funcione bien, los tomacorrientes, lámparas, reguladores, entre otros”.
Su dedicación lo ha impulsado a continuar esforzándose para alcanzar nuevas metas. Desea seguir su capacitación en el área y poder ser un ejemplo para los nuevos ingresos.
Manifestó que se siente “parte de Corpoelec porque me dieron la oportunidad de seguirme formando como profesional y de apoyar a otros, además puedo ayudar a mi familia y lo más importante es que colaboro con el crecimiento de mi país. Mi trabajo lo hago con mucho cariño, esto se convierte en una pasión, no en un trabajo y me gusta superarme a diario, adquirir nuevos conocimientos y transmitirlos a otros compañeros que tienen menos experiencia”.
Con gran voluntad, los profesionales de la electricidad cumplen su tarea de forma impecable y se enorgullecen de sus logros.
Ellos como piezas fundamentales que mueven a una de las empresas más importantes del país, invitan a todos aquellos que tengan vocación de servir en el ámbito eléctrico a que se sumen para continuar edificando victorias.
“Esta es una profesión muy bonita y si la desarrollas con amor mucho más. Nosotros tenemos una gran responsabilidad que es la de garantizar la energía a comunidades enteras, avenidas, espacios públicos, pequeñas y medianas industrias. Mi mensaje a las nuevas generaciones es que disfruten esta profesión que es muy bella y que se dediquen a ejercerla con el corazón”, exhortó Pino.
Prensa MPPEE – Corpoelec / María Mercedes Noguera