Carlos Corredor comparte conocimientos para el uso eficiente de la energía eléctrica

Guatire, estado Miranda.- Compartir conocimientos y promover el uso racional de la energía eléctrica es el propósito que hace realidad a diario el técnico en electrónica, Carlos Corredor Jiménez.

Con 34 años de servicio en la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec), Corredor se ha desempeñado en diversas áreas de la institución que le otorgan el crédito para enseñar a hombres, mujeres, jóvenes y niños en el taller denominado “Reparación de Bombillos Ahorradores y Led”.

Su área de trabajo son dos salones recuperados por trabajadores y trabajadoras del Centro de Servicio del eje Guarenas-Guatire de Corpoelec, ubicado en el estado Miranda, donde labora como jefe de Operación y Mantenimiento de Fuentes Alternativas.

Con mesas y sillas que fungen como pupitres, pizarra con información en forma de circuitos eléctricos y las herramientas dispuestas en cualquier lugar donde se alce la vista, comienza la faena diaria de Corredor y sus alumnos.

“Inicialmente, estos talleres comenzaron impartiéndose a la comunidad para la recuperación de los bombillos que desecha la misma comunidad” explicó, al tiempo que detalló cómo inició este ciclo de talleres que hasta hoy se ha convertido en un espacio para la inventiva y la conciencia energética.

La iniciativa del trabajador de Corpoelec se convirtió en un seriado de campañas de concientización que se llevaban a los centros comerciales, colegios y comunidades del eje mirandino.

Sin embargo, la necesidad de conocer, aprender y ejecutar en beneficio de los hogares; y tributar a las comunidades con un servicio de calidad, dio paso a los talleres presenciales en Corpoelec, donde se disponía de una gran cantidad de bombillos de alumbrado público que ya estaban desincorporados y “comenzamos a operar con eso”.

Recuperar bombillos salva al planeta

“La importancia de la recuperación de los bombillos primero viene de ayudar a salvar el planeta porque estos bombillos ahorradores si los desechamos contaminarían el ambiente, pero también ahorramos con el tema del costo porque cuando desechamos un bombillo podemos recuperar componentes y con eso recuperamos otros bombillos”, detalló.

Los bombillos recuperados en cada taller que dicta Corredor, tienen un destino útil: con algunos se fabrican lámparas en las que se instalan bombillos para alumbrar escuelas, hospitales y sedes policiales como hasta ahora se ha hecho.

Con la entrega de lámparas y bombillos que se donan a las instituciones, también se imparten talleres de capacitación con el objetivo de que los trabajadores puedan reparar sus propios bombillos una vez que cumplan su primera vida útil.

El servidor del sector eléctrico recordó que en una oportunidad junto a sus compañeros y estudiantes recuperaron 450 bombillos dañados, de un total de 645.

Actualmente, Corredor dicta los talleres en el Centro de Servicio y se mantiene desplegado junto a su equipo de trabajo en instituciones, comunidades y escuelas donde ha impactado a los estudiantes que han presentado proyectos para iluminar sus escuelas y con su guía estos proyectos han sido ejecutados.

En ese sentido, manifiesta que su mayor satisfacción “es que hay gente que ha sido formada (…) se mantienen haciendo reparaciones porque aquí también se les da un curso de Electrónica Básica y ellos reparan televisores, microondas y otros artefactos”.

Para Corredor, su trabajo es un estilo de vida que transmite a través de la cultura del ahorro energético y de los aprendizajes que Corpoelec le ha dado para su desarrollo personal y profesional.

“Trabajar en Corpoelec es un compromiso de vida porque todo el mundo se mueve a través de la electricidad. Es un compromiso de Patria y de país que nosotros tenemos como trabajadores y desde mi área nosotros recogemos y reparamos bombillos que están dañados y cuando los llevamos a sitios que no tenían nada, eso simplemente es una felicidad”, reflexiona Corredor.

Prensa MPPEE – Corpoelec / Rosiris Ortega