Jacsivel Barrientos, referente del liderazgo femenino en el SEN
San Bernardino, Caracas.- Ella no necesita capa para que sepan que es una heroína. Su trabajo no es convencional, pero le causa una satisfacción tremenda que su aporte contribuya a recuperar progresivamente el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) bajo dos pilares: eficiencia y calidad.
Jacsivel Barrientos, de 19 años, es la primera mujer de América Latina en formarse como electricista en redes de distribución, una labor frecuentemente encomendada a hombres como una expresión del sistema patriarcal que promueve la desigualdad.
“Hay una cultura de que solo los hombres pueden hacer trabajos rústicos, pero no es así. He sido un gran ejemplo de que las mujeres sí se pueden superar, sí pueden hacer todo tipo de trabajos si se lo proponen”, enfatiza al iniciar su jornada laboral que, en esta ocasión, la llevaría a la Avenida Intercomunal de Antímano para dar mantenimiento correctivo a las redes eléctricas.
Utiliza casco, lentes de protección, guantes y botas de seguridad, sumado a una camisa de tonos azules que la identifican como personal de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec). Su oficina, si así se le puede denominar, está en la cima de un poste de baja tensión con una altura aproximada entre 8 y 12 metros, desde donde inspecciona y repara las líneas eléctricas que circulan a edificios residenciales y comerciales.
Es una tarea que, en igual proporción, amerita de concentración y esfuerzo físico, esta última pudo significar un desafío “porque, siendo la única mujer, no me dejaban hacer mucho para que no me lastimara”, sin embargo, se convirtió en un impulso para desafiar los límites.
“Quise romper estereotipos, así fue como dije: Yo lo hago”, puntualiza Barrientos.
No ha detenido su andar por la frase “No puedo”. Desde niña, dejó ver la solidez de sus convicciones al involucrarse en actividades que, a juicio de amigos y familiares, poca relación tienen con el sexo femenino, una de ellas la formación en maquinarias y herramientas, área de la que egresó como técnico medio de la Escuela Técnica Industrial “San José Obrero” – Fe y Alegría, ubicada en Caracas.
A sus habilidades en el uso de maquinarias y herramientas, le debe su ingreso al Centro de Servicios La Yaguara. Durante cuatro meses, Jacsivel Barrientos realizó pasantías en el taller de soldadura, donde fabricó mesas de trabajo que actualmente son parte del mobiliario.
Muy cerca de su área de trabajo, se erige el Centro de Formación Integral La Yaguara, un área dedicada al aprendizaje teórico-práctico de aspirantes a técnicos electricistas del Área Metropolitana. A diario, veía con curiosidad cómo sus compañeros, con cinchas en mano, escalaban postes o descendían a lo interno de tanquillas para verificar la operatividad de líneas de transmisión eléctrica.
“Cuando me dieron la opción de hacer el curso, claramente acepté porque me llamó mucho la atención. Sentía que debía aprender sobre electricidad básica porque, como parte, de una cuadrilla debía saber cómo conectar la máquina, al entenderla me dije: me gusta, puedo avanzar, aprender más y así lo hice”, relata.
Su dedicación le permitiría culminar con el segundo mejor promedio del curso intensivo Formación de electricistas en redes de distribución, que comprende 16 unidades curriculares impartidas por trabajadores con 20, 30 y 40 años de experiencia en el sector eléctrico.
“Es la primera mujer latinoamericana en formarse como electricista. Estamos orgullosos, como profesores, como instructores, porque es la primera que se forma y eso no se había visto en ningún lado”, subraya el facilitador Francisco Espinoza.
Precisamente, su sobresaliente participación en el aula de clases, permitió que asumiera el rol de preparadora en materia de instalaciones subterráneas de las redes eléctricas de distribución, otra seña distintiva de su trayectoria corta, pero destacada en el SEN.
Ya incorporada a las tareas diarias del Centro de Servicios La Yaguara, Jacsivel Barrientos, la mayor de dos hermanos, recorre diariamente el Área Metropolitana de Caracas para atender las averías relacionadas con las redes eléctricas de distribución, como parte de las cuadrillas de Corpoelec.
En simultáneo, profundiza su formación académica en la Universidad Politécnica Territorial de Caracas “Mariscal Sucre”, donde está a escasos meses de titularse como Técnico Superior Universitario (TSU) en Ingeniería en Mantenimiento.
Sobre esa base, su objetivo es uno: ampliar sus conocimientos y “motivar a otras mujeres, a otras chicas de mi edad” a empoderarse y contribuir, desde espacios tan estratégicos como el sector eléctrico, para abrirle paso a la Venezuela próspera.
Prensa MPPEE-Corpoelec/Karelis González